Día del Vino Mexicano
Desde 1521, cuando la vid fue traída a México, nuestra producción y pasión por el vino no ha dejado de crecer. Apenas en 2023 se instauró el 7 de octubre comoo el Día del Vino Mexicano, una celebración que honra no solo el pasado y el presente de la industria vitivinícola en el país, sino también su futuro. Días como este buscan fomentar el crecimiento de la cultura del vino en México.
Aunque el camino no ha sido fácil, cada vez más personas se suman a este sueño. Hoy en día, con 17 estados productores de vino, el futuro de la industria mexicana es más prometedor que nunca. Para muchos el vino era algo ajeno a sus mesas y familias, pero gracias a estos nuevos y crecientes proyectos vitivinícolas, el vino está llegando a más hogares mexicanos.
Baja California y sus valles vitivinícolas
Baja California ocupa un lugar destacado en el mapa vitivinícola del país con 4,608 hectáreas de viñedos distribuidas en varios valles. Entre ellos se encuentran el Valle de Guadalupe, San Vicente, Valle de Calafia, Santo Tomás, Valle de la Grulla, San Jacinto, San Antonio de las Minas, Tecate o Valle de las Palmas, Ojos Negros, entre otros. Cada uno con sus características únicas de terroir, son hogar de una diversa gama de variedades que están ayudando a posicionar a México en la escena internacional del vino.
Ojos Negros, por ejemplo, con su clima fresco y agua abundante, está dando lugar a una nueva viticultura en la región. Proyectos como Dominio de las Abejas, con manejo orgánico; y Kompali, uno de los viñedos más tecnificados del país, están mostrando el potencial de este valle.
En San Vicente, con su característico suelo rojo, se encuentra Llano Colorado, uno de los principales proveedores de uva en México.Cultiva una amplia gama de variedades italianas, francesas y españolas, muchas de las cuales se usan para elaborar vinos locales.
Las otras regiones vitivinícolas de México
Además de Baja California, Coahuila cuenta con 1,000 hectáreas de viñedos, algunos de ellos ubicados a más de 2,100 metros sobre el nivel del mar, lo que les otorga condiciones ideales para producir variedades de excelente calidad como shiraz, malbec, chardonnay, y un destacado Pinot Noir. Querétaro, con 600 hectáreas y más de 70 proyectos vitivinícolas, se ha consolidado en la producción de vinos espumosos y blancos de gran calidad; mientras que Nayarit, con tan solo 4 hectáreas de viñedos, muestra que incluso los pequeños proyectos tienen un impacto en la historia del vino mexicano.
El Valle de Guadalupe, que muchos reconocen como el epicentro de la viticultura en Baja California, es sin duda el más turístico y famoso. Situado a solo 30 minutos al norte de Ensenada, es el corazón de la región vinícola más desarrollada de México. Sin embargo, más allá de este valle, existen otros proyectos emocionantes que están marcando el futuro de la industria.
Día con día surgen nuevos proyectos vitivinícolas en lugares inesperados. En La Ruta+, queremos invitarte a descubrir cada uno de estos valles y explorar el fascinante mundo del vino mexicano.
¿Qué valle te falta por conocer?
La Morra de los vinos es Luna, Sommelier desde el 2014 y amante del vino de toda la vida. A lo largo de estos años ha trabajado siempre por promover el vino mexicano en varios puntos de México como en el Bajío, Coahuila y actualmente Baja California. Siempre en constante estudio de esta industria tan cambiante. Recientemente cursó el programa de Wine Marketing en la Universidad de UC Davis en California y actualmente esta a cargo de la Coordinación de Educación Continua en el CEVIT.
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